Al presentarme yo en su domicilio, la señora me recibe
amablemente. Me cuenta que hace cerca de un mes y medio vió un pequeño gatito
rayado rondar por el estacionamiento, lo que la inquietó mucho ya que pensó que
podía ser atropellado. Pasados dos o tres días, cuando ella iba a sacar su
auto, vió como este pequeñín se escapaba bajando de una de las ruedas . Decidió,
entonces, llevar algo de comida al día siguiente. Así pasaron 4 días y en cada
uno de ellos la señora se presentaba con comida y dulces palabras; poco a poco
logró que el gatito se acercara y confiara en ella. Decidió levantarlo y
llevarlo a su casa. Al principio todo estaba bien. Pero luego él adoptó un
comportamiento huraño y agresivo. Se la pasaba escondido, sólo salía para comer
y usar su litera. Lo único que disfrutaba era, por la noche, dormir sobre una manta en la cama, junto a su
rescatadora. Poco le duró esto, ya que de la nada se fue poniendo más y más
agresivo; hasta el punto de atacar a la señora, lastimándola.
No fue fácil, pero logré examinar a la gatita. Sí, era un
hembra tabby de unos 6 meses y con buen
estado general; pero súper enojada (bufaba y pretendía arañar), sensible a los
sonidos y perfumes, capaz de pelearse con quien fuera.
La Repertoricé y receté Nux-v.. Además decidí sumar al tratamiento
las Flores de Bach; trabajando con su
extremo temor, su intolerancia y sus temibles ataques agresivos
(R-R+Beech+Rock rose+Cherry plum… entre otras). También le di un Diagrama
de Desparasitación (con medicación homeopática) y comenté la posibilidad de
esterilizarla en el futuro. Y diagramar
un plan vacunal acorde.
Al mes voy para controlarla. Al entrar ya la veo que me mira sentada en la puerta del
dormitorio (cosa impensada ya que la primera vez no salía de su escondite). Se
queda unos minutos y luego se va adentro. La señora me comenta que ya recorre
la casa y explora el patio. Si hay algo que no le gusta, huye a la habitación.
Sigue durmiendo en la cama, allí la ve mas relajada pero esporádicamente vuelve
a cambiar de actitud y la ataca. Me dice que a pesar de eso, es menos agresiva.
Le comento que por lo observado, está respondiendo al tratamiento y debemos
continuar. Vuelvo a revisarla, su estado general es muy bueno, aplico ATR,
doy protector homeopático; decido seguir
con Nux-v., cambio fórmula de Bach.
A los 15 días, telefónicamente me informa que sigue bien; ya casi no la
ataca y comenzó con conductas muy
“graciosas”. Le pido que me las describa y son compatibles con el celo.
Recomiendo esterilización apenas pase
esta fase y derivo a Cx..
A los dos meses vuelvo a verla. El exámen objetivo general es normal. Está mucho menos agresiva, pero
temerosa. Receto formulación de Flores de Bach con base en su miedo (Mímulus)
mas otras esencias.
Pasan dos meses y medio y por teléfono me cuenta que está
menos miedosa, pero a ella la sigue agrediendo de vez en cuando. Le receto otra
fórmula de Bach. A los 15 días me llama feliz porque su gatita no la ha vuelto
a agredir. La nota relajada y cariñosa. Le indico que siga un mes mas con la
misma fórmula.
La veo después de dos meses. Me recibe en el living,
curiosea mi maletín, juega con el etestoscopio. La examino sin sobresaltos y
receto una crema (base homeopática) por un pequeño raspón en su pata.
Es que está tan
sociable ahora que quiso pasarse al balcón vecino para saludar al gato de al
lado y se raspó con el alambre protector, me cuenta su dueña. Y agrega: - Es
otra gatita! Más tranquila, sociable, alegre y ya no me ataca.
Le indico Flores de Bach por 20 días mas y luego queda sin
medicación.
Al día de hoy lleva su vida normal junto a su compañera
humana y una perrita adoptada hace año y medio, con quien se lleva muy bien.
Como verán en las alteraciones de conducta la solución
requiere de tiempo, paciencia y constancia. Pero sobre todo de comprensión, ya
que esta gatita con su corta edad, vivió experiencias muy fuertes que nosotros
desconocemos, pero dejaron en ella
marcas profundas que hacían aparecer una
actitud salvaje que pudo costarle perder su nuevo hogar donde es querida y
respetada. Ahora podemos decir que es
una gata feliz, junto a su familia.
(*la foto es referencial)
Dra. Teresa A Falsetti
- Med. Vet. – M.N.
#HomeopatíaVeterinaria
#FloresDeBachEnAnimales
#AgresividadFelina